¿Cuántas veces has sido «preso» de pensamientos como éstos?

-Lo haré cuando todo esté perfecto.

-Me lanzaré cuando me sienta 100% preparada y lista.

-Tendré la iniciativa cuando se vaya el miedo.

-Cambiaré cuando el otro lo haga.

Y así continúa la lista…

Hoy te quiero invitar a que no esperes a que el miedo se vaya, a que tu pareja cambie o que todo esté perfecto para hacer lo que SABES que debes de hacer. Eres la responsable de tu vida, y el miedo y el perfeccionismo irán perdiendo poder en la medida que avances y afrontes con valentía cada paso.

Te animo a que pongas más tu mirada en el PROPÓSITO real y genuino que existe detrás de esa iniciativa, cambio o sueño que tienes. Enfoca tu mirada en el para qué de lo que vas hacer, y menos en lo que «sientas». Con esto no te digo que menosprecies tus sentimientos, sino que los pongas en perspectiva, pues los sentimientos no son estables, y ellos solo procuran evitar sentirte «incómodo o mal». Pero te contaré algo, detrás de muchas situaciones incómodas hay grandes tesoros ocultos que te permitirán moverte de la parálisis donde te encuentras.

Este es parte de la filosofía de la Logoterapia. Ella nos anima a orientarnos más por valores que trasciendan (fe, familia, servicio, amor, etc.), que dejen huellas en la vida de los demás, aunque en ocasiones el escenario no sea el más fácil y cómodo; pues lo fácil, rápido y cómodo es por lo general parte de la búsqueda de placer del ser humano, mas no del sentido, de lo valioso y significativo.

¡No busques lo FÁCIL, elige lo que tiene SENTIDO!